... hace muchos años de aquello; hace mucho que no existe el muro de la escalera, por la que vi subir el reflejo de su vela; también en mí se han destruido muchas cosas que, según creía, habían de durar siempre y se han erigido otras nuevas y han engendrado penas y alegrías nuevas que no habría yo podido prever entonces, así como las antiguas se me han vuelto difíciles de comprender.

... hace mucho tiempo también que mi padre ha cesado de poder decir a mamá: «vete con el niño»; la posibilidad de tales momentos jamás renacerá para mí; pero desde hace poco empiezo de nuevo a percibir muy bien -si presto oídos- los sollozos que tuve fuerzas para contener delante de mi padre y que no estallaron hasta encontrarme solo con mamá.

... en realidad, nunca han cesado y sólo porque ahora la vida se calla más a mi alrededor los oigo de nuevo, como esas campanas de conventos, tan bien cubiertas por los ruidos de la ciudad durante el día, que parecen haber callado, pero vuelven a tañer en el silencio de la noche.

... marcel proust, en busca del tiempo perdido - por la parte de swann -

advertencia legal                               2visuales@2visuales.es                       diseño web: 2visuales

609 131 164       621 210 797